Paisajes naturales

                                       Paisajes Naturales 

Los paisajes naturales incluyen zonas áridas, selva, sabanas, montañas, médanos, picos nevados, ríos y playas. Esta variedad se debe a que se trata de uno de los 17 países megadiversos del mundo.

Además, el 63 % de su territorio lo constituyen las llamadas Áreas Bajo Régimen de Administración Especial, que representan el grupo de áreas protegidas más grande de América Latina.

Venezuela es un país sudamericano con más de 916 mil kilómetros cuadrados, fuera de los 159 542 km² que le disputa a la Guayana Esequiba desde tiempos de la Colonia. Además, esta nación ejerce soberanía sobre 71 295 km² de mar territorial.

Tiene poco más de 30 millones de habitantes, de acuerdo con el censo del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2011

El auge petrolero trajo entre sus consecuencias que la mayor densidad de población se ubique en el norte y el occidente del país.

No obstante, aun en esas zonas se pueden apreciar bellezas naturales. Venezuela se divide en 23 estados y un distrito capital.

1- Los Roques

El Parque Nacional Archipiélago de Los Roques está ubicado en el mar Caribe y lo conforman unas 50 islas y 292 cayos y bancos, aproximadamente.

Este parque se fundó en 1972 y ofrece un pasaje de arenas muy blancas y aguas cristalinas que exhiben un azul turquesa en el horizonte. Su temperatura promedio es de 27,8 °C y llueve poco durante el año.

2- La Gran Sabana

Considerada como Patrimonio de la Humanidad desde 1994, la Gran Sabana es un parque nacional localizado en la frontera del sureste venezolano. En este se pueden apreciar paisajes selváticos, ríos, tepuyes y cascadas.

Los 18 mil kilómetros cuadrados de este parque están constituidos por el macizo de las Guayanas.

El clima de La Gran Sabana es tropical húmedo y posee una  vegetación herbácea y bosques frondosos.

Los pemones le llaman a este territorio Wek-Tá, que significa “lugar de cerros”, y se conoce en el resto del país como la Gran Sabana desde 1930, aproximadamente.

3- Salto Ángel

El Salto Ángel pertenece al Parque Nacional Canaima del Estado Bolívar en Venezuela. Nace en una meseta denominada Auyantepuy.

Se hizo más conocido luego de que un aviador estadounidense llamado James C. Ángel aterrizó allí buscando oro en 1937.

Es el salto más alto del mundo (mil metros de caída libre) y también es Patrimonio Natural de la Humanidad desde 1994.

El Salto Ángel ofrece un paisaje imponente con una vegetación muy densa que incluye más de 500 especies de orquídeas y bromelias; y ríos rojizos.

4- Roraima

Es el tepuy más alto y más conocido de la Gran Sabana. En su estructura hay cuarcitas, areniscas y algo de pizarra.

Es el más alto de la cadena de mesetas de la sierra de Pacaraima, en América del Sur. En su cumbre existe un área delimitada en 1931 en la que convergen las fronteras de Venezuela, Brasil y Guyana. Su antigüedad se calcula en 2000 millones de años.

El cerro Roraima, o Roroima, alberga especies vegetales endémicas como algunas especies de orquídeas, líquenes y bromelias. Allí coexisten algunas especies animales únicas, como el vulnerable ratón del Roraima.

5- Parque Nacional Mochima

Se trata de un parque nacional ubicado a 600 metros sobre el nivel del mar que bordea la costa marítima noreste de Venezuela.

Se forma de múltiples playas con aguas cristalinas y arena muy blanca. Estas playas son resguardadas por montañas de vegetación tropical con helechos, orquídeas, mangles, batatillas de playa y cardones. Hay tortugas marinas, delfines y ballenas arenquera.

Una de los cuestiones fundamentales en el trabajo del desarrollo de los destinos turísticos es conseguir integrar el paisaje con los recursos existentes en los diferentes espacios rurales. En definitiva, el objetivo es detectar y analizar cuales son las acciones que pueden favorecer la calidad percibida por los turistas de esos paisajes vinculados a los destinos turísticos. Desde el punto de vista del embellecimiento se pueden abordar diferentes aspectos como son:

• Descubrir y recuperar recursos del paisaje.
• Identificar y proteger los ámbitos que forman parte de la escena y el paisaje visible por el turista.
• Tratar de reducir impactos por el acceso de los vehículos y las personas.
• Mejorar, en la medida que sea posible, el tratamiento de elementos constructivos.